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Mostrando las entradas de septiembre, 2020

Secuela que se excede (Crítica de Cobra Kai)

 Considero pertinente resaltar las virtudes de una secuela que comienza de manera perfecta, contándonos que fue de la vida de Daniel LaRusso y  Johnny Lawrence, 30 años después del enfrentamiento final en el torneo de  karate All Valley. Cabe destacar que la primera temporada se centra en la vida de Johnny, un antihéroe encantadoramente terrenal, que no ha podido superar las decepciones de su adolescencia y continúa a la sombra de Daniel San, quien siguió por el sendero del éxito, convirtiéndose en un poderoso empresario automotriz. Esta primera entrega plantea dilemas éticos muy interesantes acerca del rol "héroe-villano" que cumpliera cada personaje en la versión cinematográfica de los 80's. Los conceptos actualizados del bien y el mal que imperan en el siglo 21, llevan a ésta nueva camada de espectadores (y a los viejos espectadores con parámetros nuevos) a replantear la historia.  El uso de los flashback se vuelve esencial para la conexión sentimental con Karate Kid y

El destino de Kagemusha

El crepúsculo se devoró la sombra de Kagemusha que caminaba desorientado en la oscuridad, buscando el sendero de vuelta. La recolección había terminado y los cazadores ya estaban de regreso, la noche es peligrosa en la región del Karakorum y los Hunza lo saben, son amos del Valle desde hace milenios. Pero a Kagemusha lo sorprendió la oscuridad aún lejos de casa. La negrura ya era tal que no veía sus pies, mucho menos esa laja suave desprendida sobre la que se paró. La roca se deslizó y por más que el joven aleteó buscando de donde aferrarse no lo consiguió y se precipitó violentamente por el empinado barranco. Tumbos, miedo, dolor y luego el silencio. Con los ojos cerrados repasó mentalmente cada extremidad de su cuerpo, pero el frío las había entumecido, o tal vez alguna ya no estaba ahí. Una respiración profunda resonó mas fuerte que la suya y que la brisa, llenando el espacio vacío. Kagemusha se agazapó con su espalda pegada a un paredón y sus pupilas se dilataron tanto que pare

Kusambasa

 ¿Alguna vez apuraste el paso en la oscuridad sintiendo esos largos y filosos dedos rozarte la espalda? Yo también los sentí, demasiadas veces. Los sentía al salir de la ducha, los sentía al caminar por el parque, los sentía al entrar desde la calle cuando, al traspasar la puerta la mitad de mi cuerpo, el tiempo se ralentizaba y un escalofrío me recorría la espalda. Pero lo ignoré, demasiado tiempo. Fingir que algo no pasa no es la mejor estrategia, mas aún cuando comienzas a notar los arañazos en la espalda e intentas convencerte que es una reacción alérgica al jabón. Una noche desvelado, intentando ponerle palabras al insomnio, lápiz en mano y la vista puesta en el cuaderno, detecté un tenue movimiento a través del rabillo del ojo. Lentamente desvié la mirada sin mover el cuello, como quien no quiere enterarse de lo inevitable. Sus ojos penetrantes me miraban fijamente y en su boca entreabierta había una mueca desconcertante, entre burla y hambre. Parecía sentada delante de su vent

Viento negro

  Ella buscó su boca y él respondió. Se besaron un momento. La música sonaba con fuerza, era clásica, algo familiar, aunque no pudo distinguir la pieza. De pronto algo lo sobresaltó, creyó escuchar que llamaban a la puerta. Notó que no recordaba como era el exterior pero no reparó demasiado en eso. Ella se quejó _No le prestes atención, será el viento_. Pero algo lo inquietaba. La habitación era parte de algo mas grande y se situaba a la izquierda de la entrada, una especie de zaguán mas ancho de lo normal (accediendo desde la puerta, tres o cuatro pasos hacia el frente y dos hacia la izquierda). Notó que de alguna forma no conocía el resto de la casa, no sabía por que. Y ya no recordaba cómo había llegado allí. Intentó sentarse en la cama y se percató de algo aún peor, no sabía quién era ella. En algún momento la música se detuvo. El silencio reinaba absoluto y la penumbra lo cubría todo. Ella ya no estaba, se encontró solo y nervioso. Desde la calle le llegó un sonido a través